Bob Lynam es un hombre como otro cualquiera cuando no lleva al alzacuellos blanco que lo distingue sacerdote. El padre Lynam conoce a la familia de Jon Bon Jovi desde la década de 1980, justo desde que fue nombrado el nuevo sacerdote de una Iglesia de Sayreville en el barrio donde vivía Jon. El ha ayudado a gestionar el Club de Fans Oficial de Bon Jovi. Todo comenzó cuando un grupo de jóvenes parroquianos le sugirió la idea de escribir una carta al cantante con el fin de que este participara en un evento benéfico. Su intención era recaudar fondos para ampliar las instalaciones de un albergue para adolescentes llamado Covenan House. Jon no pudo acudir por muchas obligaciones pero mandó a su madre, Carol Bongiovi, quien donó varios objetos firmados por su hijo para que hicieran una subasta. La amistad entre el sacerdote y la familia de Bon Jovi se fue consolidando poco a poco, y este termino siendo un gran fan de la banda de New Jersey hasta tal punto que en la sacristía, al lado de varios objetos religiosos ha creado un área exclusivamente a Jon Bon Jovi y su grupo.
Durante años fue coleccionando diversos objetos de la banda como fotos, recortes de prensa y revistas y pases de backstage. Él dice que es como una capilla Bon Jovi. Los objetos sin duda llaman la atención. Las parejas que visitan la iglesia para organizar su boda, con frecuencia terminan pidiéndole que interceda para que Jon Bon Jovi cante ese día. A finales de los 80, Bob Lynam acompañó a los padres de Jon a Rusia, donde la banda iba a participar en el Moscow Music Peace Festival. Unos amigos le recomendaron al párroco que llevase cigarrillos, medias de mujer... para utilizarlos como trueque durante su estancia. Y así fue como con 2 paquetes de cigarrillos, Lynam pagó al taxi que los llevo a la Plaza Roja. Tras 25 años dedicados al sacerdocio, Bob viajó a Roma, donde fue honrado por su trabajo con una misa especial que fue oficiada en la Basílica de San Pedro.
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